El 3 de marzo, era un día de mucha lluvia, de esos que definen el tiempo del cantábrico a la perfección. A priori nada favorables para salir de caza y menos para salir victoriosos y volver a casa con algo más que un resfriado. El viento a favor nos hacia presagiar algo bueno. La lluvia dejó de incordiar durante el momento fatídico y la caza no pudo ser mejor. Con un disparo al aire, 3 pájaros al suelo.
miércoles, 11 de marzo de 2009
3 pájaros de un tiro
Era cuestión de estar en el sitio preciso en el momento oportuno. Con un tiro hemos matado a tres pájaros. Además de esos que no pasaban últimamente por nuestras tierras. El cuarto se llama “La Permanencia ” muy conocido para nosotros y que en los 111 años que hemos ido de caza, en ninguna hemos fallado y siempre ha sido de nuestro guiso.
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